EXTREME IRONMAN SALOU

¿Por qué me gusta tanto el triatlón?, pues no lo se. Solo se que me siento bien haciendo esta combinación de pruebas que resulta ser un deporte.

¿Por qué dentro del triatlón lo que más me gusta es la larga distancia?, porque la sensación de acabar una prueba larga es gratificante para el alma (no sé si para el cuerpo), y la sensación de acabar un ironman es indescriptible.No estas seguro en ningún momento de controlar la prueba, las tres distancias por separado asustan y enfrentarte a ellas en solitario asusta mucho mas.

Escribiendo esta crónica me emociono, no hay que perder la ilusión para durar muchos años, se me llenan los ojos de lágrimas que saben a sal del sudor del domingo y que no pude derramar al entrar en meta por que el cansancio no lo permite y porque en este caso prefería mirar a Cesar (mi hijo), que entro conmigo y estaba mas emocionado que yo.

Si está dentro de vuestras posibilidades hacer un Ironman, ya se que es un reto difícil, pero mas asequible de lo que parece ya que hay margen desde las 8horas, si pretendéis ganar, hasta las 16horas que cierra el control.Con solo plantearse acabar ya es bastante duro, pero la recompensa es para toda la vida, no solo participas tú, también los que te rodean (si no los has quemado durante la preparación), se emocionan y alegran tanto como tu, o más, porque tu siempre piensas que lo puedes hacer mejor.Incluso los que no te quieren se alegran al ver que te has dado la paliza para nada.

Un Ironman no es solo el día de la prueba, son 2-3 meses de preparación con muchas cosas que hacer, no solo entrenar.Siempre la misma pregunta, ¿acabare?.En mi caso creo que siempre voy justo de entreno y para esta prueba puede ser fatal, pero confío en la experiencia y fondo acumulado a lo largo de los años, además de conocer los ritmos que mi cuerpo puede mantener según las distancias a recorrer.Esto solo se consigue entrenando mucho o teniendo algunos años en cada pierna, y para Salou yo confiaba en lo segundo.Solo pensaba en disfrutar la mayor parte de la carrera, correr según sensaciones y conseguir un crono que según la dureza del circuito consideraba digno, sobre las 11horas.

Una vez realizado los 10-12 entrenos específicos para el Ironman y confiando en el poder de la mente nos vamos para Salou el día anterior a la prueba.

Al llegar retiramos el dorsal y en la reunión informativa nos juntamos los 4 componentes del Triatlón Utebo, Pablo , Oscar , Raúl y yo con un poco de nervios pero con muchas ganas.Enhorabuena a los tres por ser finisher.

Un paseo por la expo para ver cosas, comprar como recuerdo una visera EXTREMEMAN, y a comer pasta,  comentando historias con Raúl de experiencias vividas y contadas con gracia, que casi me hacen doblarme de la risa.Este tío es un fenómeno, primer triatlón y primer Ironman con ese punto de locura tan necesaria para afrontar la vida con valor, al final hizo 12h33' pero con mucho margen de mejora y disfrutando mucho.

Por la tarde dejamos las bicis en boxes y casi podían dar la salida ya para no alargar la agonia.Cenamos con los compañeros del triatlón Europa, Alex y Juan y a dormir, esto en un decir porque ni la verbena del hotel (estamos en Salou) ni el partido de España ni los nervios nos dejan.

Al día siguiente madrugamos mas de lo normal, a las 4.45 arriba desayunamos poco y sin ganas y para la salida.

A las 6.30 cañonazo de salida y a nadar dejando pasar los metros y los nervios sin mirar el reloj.

Casi se hace corta la natación y eso que había que esquivar alguna medusa, a la salida la gente aplauden y animan pero si son las 7.30 pienso que valor, y para mayor sorpresa estaba por allí el Leciñeno que también nos apoya, (gracias Javier por los ánimos aquí y en el circuito ciclista), hacemos la transición y nos ponemos la ropa del Utebo para que se nos vea bien y a darle a los pedales.

La bici la empezamos con calma y pronto me pasan los 'buenos', Pau Zamora y demás para disputarse la carrera, yo agacho la cabeza y a lo mio.El circuito ciclista muy bonito, muy largo y muy duro, dicen que salieron 184km y 2700 de desnivel positivo, no lo se, pues no llevo ningún aparato para comprobarlo, a mi solo se me hicieron largos los últimos 20km llanos y contra el aire, tan largos que llegue apajarracao a la transición, pero no pensaba en lo que me queda.

Me siento, descanso un poco y sin prisa  me visto de atleta y salgo a correr por lo menos 20km en condiciones, y así fue 20+1, o sea 21km con buen ritmo, y a partir de aquí a terminar, como ya no me apetecían durante la primera media maratón no comí ningún gel, solo agua, así que me quede sin gasofa, la tercera vuelta fue penosa andando algún ratillo largo y medio mareado, pero como fui comiendo geles me recupere un poco para poder terminar la 4ª vuelta mas o menos en condiciones, al cruzarnos con los conocidos nos animábamos, en especial con Javier Clavero que para mi es una leyenda del triatlón aragonés y creo que el que mas Ironman ha hecho de Aragón, enhorabuena por otro mas Javier.

Devoro los últimos kilómetros como puedo y al llegar a meta me espera Cesar con pancarta y todo y muchos aplausos del publico y amigos, entro en meta con mi hijo y una sonrisa de oreja a oreja, pienso que a este crío le gusta el DEPORTE (si, con mayúsculas y con todos sus valores) tanto como a mi , me alegro por él, si tiene cabeza lo pasara tan bien como yo me lo paso.

Yo vuelvo a ser finisher 18 años después, con dos cojones.

Mas información de la prueba aquí.